Hablemos de Astrología 2
Ahora la pregunta es, cómo cambiar aquello que nos lleva a sentir,
reaccionar y a actuar de una forma determinada frente a un acontecimiento.
El ser condiciona la acción, y esto es objetivismo desde el punto de
vista filosófico.
Si yo digo que soy tímida, y digo que no puedo hacer algo porque mi
timidez no me lo permite, esto es una verdad absoluta para mí.
Quien es determinista dirá que tienes tales planetas y tales aspectos
que te llevarán a determinados acontecimientos sin que uno pueda hacer nada al
respecto, quien interpreta desde el libre albedrío, dirá, esta es la tendencia
pero la puedes modificar utilizando más tal o cual energía, para evitarte
problemas.
Hasta aquí lo que en general podemos pensar de nuestras falencias y de
nuestras virtudes, pero, ¿que pasa cuando una experiencia fortuita nos muestra
no sólo que no somos como pensamos, sino que somos capaces de mucho más de lo
que creíamos?
Escuchando el relato de otra persona, cuántas veces decimos “si me pasa
a mi me muero, no sabría que hacer”, o “yo no sirvo para eso”, pero resulta que,
llegado el momento, no nos morimos, sabemos exactamente qué hacer en esa
situación y servimos para lo que nos toque vivir.
Porqué nos pasa esto, porque vamos por la vida creyendo que somos una
persona determinada, y si, lo somos frente a los acontecimientos diarios, que en
general no son movilizadores, creyendo que nos conocemos y que estamos ya en
otro nivel de conocimiento, porque he leído mucho, he tratado de desmenuzar mi
interior y creo haber llegado al núcleo de mi personalidad.
Pero en realidad es como estar congelado.
Nadie es un superado, todos tenemos zonas nuestras que no conocemos y
éstas afloran sólo en momentos de enorme tensión, así como la adrenalina nos
prepara para huir y conservar la vida.
¿Y la consulta al Astrólogo que es lo que puede darnos?
Nos puede dar luz sobre esas zonas nuestras que creemos conocer, nos
puede dar una mirada diferente sobre nuestra vida, pues uno está inmerso en
ella, y en general, no ve lo positivo. En cambio, el Astrólogo está por fuera y
mirando un papel con un dibujo y por eso tiene otra mirada sobre la vida de
quien consulta, y quizás otro relato que contar sobre el consultante, y muchas
veces este nuevo relato, nos abre el camino para que pensemos sobre nosotros de
forma diferente.
Hay un precepto o una gran frase que la dijo una colega, la Sra. Silvia
Ceres cuando participé de uno de sus seminarios que me parece excelente, más
allá de que me dejó pensando mucho en ella:
“Atiende tus pensamientos porque se tornan palabras, escoge tus palabras
porque se tornan acciones, entiende tus acciones porque se tornan hábitos,
estudia tus hábitos porque se tornan carácter, cuida tu carácter por que se
torna en destino”
Si bien es una frase de Ghandi, la profesora Ceres, la adecuó a lo que
hacemos en Astrología.